Vistas a la página totales
85,031
jueves, 23 de agosto de 2018
viernes, 17 de agosto de 2018
miércoles, 15 de agosto de 2018
jueves, 9 de agosto de 2018
miércoles, 8 de agosto de 2018
lunes, 6 de agosto de 2018
Vistiendo otra piel...🌹
Por: Profra. Irma
Beltrán Sáinz
Cuando una mujer decide olvidar se pone otra piel y se vuelve a enamorar.
Se viste de amor, de paz y ternura, extiende sus brazos y abre sus alas, emprende su vuelo y se siente segura porque ha descubierto que aún vestida encuentra unos ojos que pueden mirar su alma desnuda.
Nada hay que pueda
perturbar su paz, ya nada le puede robar la cordura, se viste con piel de
tierno cordero y sale a la calle a cazar al lobo, al que tiempo antes, mucho había temido.
Cuando la mujer decide vestirse con pieles distintas, esas que se encuentra en divinos cuerpos, es porque en su vida, perdonó una vez, perdonó mil veces. Y se sintió perdida entre las mentiras de un príncipe azul. Hasta que un día por fin descubrió que este no existía, y quiso acabar con un cuento falso y lleno de mentiras.
Ya con su piel nueva, guardó en el baúl las risas fingidas, los malos momentos, su vida pasada y todo el dolor de haberse vestido con caricias falsas y besos compartidos.
Contempló la historia en sus fotos viejas, enjugó sus ojos y de sus adentros salió tristemente su mejor sonrisa, guardó lo mejor de su antigua vida, al fin que importa lo que ella guarde, si serán tan sólo los hilos que un día a ella le tejieron un vestido hermoso en una piel joven.
Cuando una mujer decide cambiar la piel que la cubre, es porque los besos que un día la vistieron, la fueron llenando de promesas falsas.
Si un día observas que otros colores asoman coquetos al rostro alegre de algunas mujeres, es porque quizá,
alguien diferente, le ofreció su piel, o quizá una caricia y el rubor asoma al casto pudor de saber que puede vestirse a su edad con pieles distintas.
Para ti mujer escribo mis versos, a ti que en tu cuerpo está ahora viviendo un corazón roto o un resentimiento.
A ti que tus ojos se tornan machitos por tanto llorar un cariño muerto.
Vístete mujer, vístete de gala y sal a la calle, muéstrale al mundo que una mujer, cuando se decide a cambiar de piel, es porque se vio desnuda al espejo y ha descubierto que, con cualquier piel, se verá decente, linda y distinguida.
Sal a caminar y ve a vivir de nuevo, al fin que una piel, es solo la caja que recubre el cuerpo y cúbrela otra vez con caricias nuevas.
“No olvides jamás que hoy te encuentras viva, y que si te decides a cambiar de piel, siempre encontrarás un hombre amoroso y justo a tu medida”
Sólo soy...
Por: Profra. Irma Beltrán Sáinz
Un día solté mis sueños, ¡Esos que
me costó aceptar que no serían una verdad jamás!
Miré al cielo creyendo que un
milagro podía suceder y que valdría la pena un intento más. La cruda verdad y
la triste realidad comenzaron desde siempre a hacerse presentes entre la tierra
y el cielo donde se gestaban mis sueños y donde al mismo tiempo, se morían mis
ilusiones.
Quise creer que siempre sería mi llegada al
mismo punto de partida, y comprobé que nada nos ata al lugar que no nos hace
sentir acogidos. Hoy he vuelto y estoy viviendo en el país de mis sueños, tal
como Alicia la de los cuentos lo hizo un día en el país de las maravillas.
Esta vez no son sueños locos, sino
más bien, son sueños reales y crudos. Unas veces se han tornado alegres y otras
muy dolorosos.
Hoy no tengo pendientes guardados en el
tintero. Tampoco construyo ni acepto promesas que no se cumplen. Aprendí que
viviendo día a día, es como se van quedando menos cosas no resueltas.
Hoy me entrego al amor y a los
placeres de la vida... Disfruto de aquello que me agrada y hace feliz mi día.
Dejé de pretender que todo dura mucho, y entendí que la felicidad se hace de
instantes y reconozco que más vale ser feliz en repetidas veces. Al fin que la
felicidad, son sólo instantes que se van atesorando a lo largo de una vida.
Hay quienes de repente, se
volvieron insensibles a mi lado, y se perdieron en la cotidianidad de la vida.
Pasaron su tiempo buscando la felicidad en el corazón otras personas, y no
llegaron jamás a darse cuenta, que su mejor campo de diamantes estaba en su
propio corazón, en ese lugar que nunca buscó, por negarse a cambiar, y a ser
quizás menos exigente.
La gente siempre habla, siempre
opina y forma sus alegóricas historias. Unas son verdades y otras muchas, son
mentira. Hubo quienes no se atrevieron a vivir como querían.
Hoy solo soy… Y no me importa cómo
me vean otros ojos, si jamás sabrán lo que fue para mi dejar volar mis sueños e
irlos conquistando nuevamente uno a uno, después de haber vivido los sueños de
otros.
El temor a equivocarme, una vez
más, perdió la batalla contra mi osado atrevimiento. Al final nunca entenderán
que vivir sintiéndonos vivos, es la más hermosa y añorada hazaña que se haya
conquistado.
Hoy las sonoras carcajadas de
alegría me acompañan a conquistar mis nuevas aventuras. Hoy sé que, siendo
feliz, es la mejor forma de pagarle a la vida por todas las bondades recibidas.
Hoy ya no tengo más tiempo que perder, estoy donde yo lo he decidido. Y si mañana
Dios piensa lo contrario, y me llama a su lado, les pido que no me recuerden
como la mujer que "hubiese podido ser", sino más bien , recuérdenme
como la mujer que fue como siempre quiso ser...
domingo, 5 de agosto de 2018
jueves, 2 de agosto de 2018
Suscribirse a:
Entradas (Atom)