La Paz Baja California Sur, a 14 de Julio de 2015
Lo cotidiano de la corrupción
Por: Salvador
Castro Iglesias
¿Increíble
no?, ahora resulta que el Chapo se escapó y nadie sabe nada, que si el túnel,
que si salió caminando, que si esto, que si lo otro, al leer todos los
comentarios vertidos en la redes sociales, me doy cuenta de que la corrupción
es algo tristemente cotidiano es nuestro país.
Obviamente no
deja de ser preocupante que el Chapo se haya escapado, pero para mí lo más que
debería mortificarnos es saber que como siempre, no pasará nada, ni renunciará
el tal Osorio, mucho menos el Presidente, y lo más seguro es que terminen
metiendo al tambo a algunos funcionarios menores y san se acabó.
Por otra
parte, leo cada día como oleadas de corrupción se permean en las redes, que si
tal o cual funcionario se volvió rico de la noche a la mañana, que si Pemex ya
valió chetos, que si la reforma Educativa solo les pondrá en su maraca a los
maestros, que si el IVA a los tacos, tortas, memelas y demás.
A veces siento
que vivo en un País virtual, ese en donde no pasa nada aunque pase y en el que
los políticos modernos (pero con mañas viejas), se van enriqueciendo a costa
del erario público y nadie hace o hacemos nada, vemos como literalmente saquean
a México ante la mirada indiferente de nosotros.
Cada día que
pasa nuestra moneda se desliza hacia el abismo, nadie da cuentas en que se
utilizan nuestros recursos, un Presidente que hace oídos sordos a los reclamos
de los ciudadanos, mientras alegremente se va de viaje a Europa con más de 400
funcionarios y lacayos, dejando de lado las necesidades más urgentes.
¿Será acaso
que los Mexicanos somos corruptos por naturaleza?, ¿Qué solo nos interesa
acumular riquezas, llegar a ostentar un cargo público con el único fin de
enriquecerse olvidando la obligación de cuidar los dineros asignados y usarlos
en beneficio de la sociedad, o despilfarrarlos a sabiendas que jamás serán
enjuiciados por sus fechorías?
Caray amigos,
en verdad es deprimente esto, veo como además los políticos y muchos
funcionarios (con sus honrosas excepciones) se han vuelto cínicos, ejemplo de
ello lo tenemos con lo sucedido en las pasadas elecciones, en donde el candidato
del PRI Ricardo Barroso acusa a su contrincante Carlos Mendoza Davis de haber
excedido los topes de campaña y resultó ser el quién se surtió a lo grande y no
pasa nada, ¿Qué descaro no?, pero lo peor es que cómodamente regresará a seguir
cobrando como Senador y que viva México.
Y así como ese
tenemos todos los días muchos casos de evidente corrupción, que para tristeza
se solapa por quienes dijeron cuidar de nosotros, Ministerios Públicos, Jueces,
Funcionarios, etc. Y por supuesto que gran parte de la sociedad civil tenemos
responsabilidad en ello. Nos quejamos, vemos las pruebas evidentes y no hacemos
absolutamente nada.
Podría seguir
escribiendo casos en los que es obvia la corrupción, del tal Romero Deschamps,
del Ex Gobernador Marín, de las misteriosas desapariciones de los dineros del
Ayuntamiento de Los Cabos, de la presa que se construyó solo para su beneficio
el Gobernador Padrés, de los bienes que cínica y descaradamente le fueron
devueltos al hermanito de Carlos Salinas de Gortari y así hasta el infinito y
más allá, pero como siempre, sé que de nada servirá, a nadie o a muy pocos nos
importa, mientras tengamos novelas, futbol y para las cheves en fin de semana
seremos felices.
Bien dijo una
vez Don Porfirio Díaz… “Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de los
Gringos.
… Nos leemos
más adelante
No hay comentarios.:
Publicar un comentario